domingo, 5 de julio de 2015

DIA 4

-¡No sabía que estabas esperando otra vez, te felicito!
-No, si no estoy embarazada; sólo estoy gordita. Pero ¡gracias! ¡Ya era, tener 5 hijos!

Me fui del kiosko con las cartulinas de colores enrolladas y agarradas por una gomita elástica para disfrutar de una hermosa tarde de lluvia haciendo las tarjetas caseras del día del padre con los chicos. Me reía sola. Pero no de mí misma. Me reía de lo graciosa que había sido la situación. ¿Y qué, si aún parezco embarazada, a seis meses del parto, pese a la dieta? Di vida a CUATRO seres maravillosos que llenan mi tiempo, mi espacio y sobre todo, mi vida.  

Embarazo incipiente de Catalina
(Sin ojeras ni SALVAVIDAS...
ni CATALINA)

6 meses de Catalina
(...CON Catalina!!! ¿Qué más hay?)
Llegué a casa empapada pero feliz conmigo misma y con ellos. Porque es gracias a ellos que estoy así, es gracias al riesgo de prematurez de mi última bebita que me dediqué a pasar cada minuto de vigilia "a engorde" desde que fisuré membranas en la semana 30 de mi embarazo. 

Hoy por hoy, cada vez que le hago cosquillas entre los rollos de la papada soy feliz y me da paz verla rebosando salud. 

Por lo pronto, he decidido que esta vez no puedo darles la dieta a regañadientes como corresponde. Van a tener que esperar ...al menos hasta que elija no darle más de mamar a mi querubincita. 

Sí prometo cuidarme y mantenerlos al tanto, pero sin fanatismos que a nada me llevan ahora. No necesito a mi cuerpo por ahora como lo necesitaba mientras trabajaba como modelo. Estoy tranquila porque mi tarea en este momento es mucho más útil al planeta que todas mis profesiones juntas. Y en el peor de los casos, siempre seré abogada... ;-)



jueves, 2 de julio de 2015

DIA 3 - BUSCANDO A NEMO

Hola a tod@s! Estoy medio estancada con la dietita (si me miro con un solo ojo; si me miro con ambos, estoy totalmente estancada). 

Supongamos que las vacaciones de julio tienen su cuota parte de culpa. Mis turnos noctámbulos al comando de las memas y pañales se ven invadidos por una insubsanable realidad: De mañana, no hay tregua. Es decir, los turnos no son tales; SIEMPRE estoy de turno. Soy como la farmacia ideal, nunca cierro, ni siquiera en feriados no laborables; nunca me quedo sin stock, nunca hay retrasos en el delivery. Nada de dormir unos 20 minutitos más, ni qué hablar de unas horitas. Hay vacaciones... Nadie se va a ninguna parte (salvo el suertudo del paterfamilia) y yo trato de tapar una olla aquí y otra por allá. Igualmente, ellos siempre me ganan y llevan la delantera. Para cuando tapo una olla, siento que se me destaparon dos. 

No hay peor cosa para una ex dormilona compulsiva que ser despertada 7 veces de noche y tener 20 ítems en la lista de prioridad ALFA UNO antes de poder lavarse los dientes cuando ya la esperanza de echarse un último sueñecito es nula. Fíjense qué ironía, literalmente puedo afirmar que mi fama de lirón trasciende las fronteras y los mares. Durante el certamen Miss World 2000 en que representé a Uruguay, mis amigas misses tuvieron un mes para convivir conmigo y llegaron a pegarme un cartel en la puerta de la habitación que decía URSINHO DORMILAO. Captaron mi ser en toda su esencia.

Por eso, esto de adorar tanto a los niños como para embarcarme en un mega proyecto de familia ha sido muy gratificante, a la vez que muy desafiante. Todos los humanos con hijos lo saben. Un bebé con hambre, popó o sueño es imbatible... 'round the clock! Da igual, por suerte, ya estoy aprendiendo a pilotar la nave de 6 pasajeros de forma más astuta; cada vez que me levanto de madrugada, voy arreglando el pato como puedo. Es decir, si de camino a la cocina -a las 2:15 AM- pateo un pañal sucio hecho bollito en el piso, me levanto y lo llevo ya que estamos. Si veo una mamadera sucia -3:28 AM-, la lavo. Si el perro se hace el vivo y pide salir en una de mis levantadas -4:05 AM- le abro, por qué no, la puerta. Si me doy cuenta de que está por amanecer de todos modos, me lavo los dientes y desayuno, así sean las 5 de la mañana. Sino, sólo Dios sabe si me va a tocar y cuándo me va a tocar una tacita de algo. O un vasito. O una mordidita.

El desafío logístico de tener tanta gente (sí, somos tantos que hablar de personas me parece como poca cosa) es impresionante. Claro está que todo el mundo espera que esté todo lo suyo impecable y a tiempo. Y no me vengan con eso de la culpa del chancho y de quien le rasca el lomo porque l@s quiero ver a ustedes cuando eran niños. ¿O no? Mamá todo lo podía, todo lo debía, todo lo HACÍA. Era casi casi como la carta del apóstol San Pablo a los Corintios, esa que habla de que el amor todo lo puede. Si pudiera hablar todas las lenguas del mundo... les diría BEING THE MUM SOMETIMES SUCKS!

Claro que las risitas y carcajadas sin parar son un tesoro que nadie valora más que una madre.

Pero mi punto es que, dada esta coyuntura de crisis (en el sentido de cambio, qué pensaban), lo de la dieta es un mal necesario, hágase énfasis en MAL.

Aún así, tengo una buena noticia. En realidad son dos:
1) En primer lugar, mi espalda me está doliendo menos. Ello se debe, sin dudas, a la hora diaria de ejercicio que estoy obligándome a hacer. Así sea que la tenga que fraccionar en 3 caminatas de 20 minutos a lo largo del día, el ejercicio aeróbico no puede faltar en una etapa de régimen con semejante  demanda energética, es decir, no me podría plantear una dieta si tuviera que dejar de comer y listo. El ejercicio es aquí la clave.
2) La segunda la iba a escribir pero no podía dejar la tijerita de las uñas de los nenes tirada por ahí así que la fui a guardar y al volver... Cri cri...

¿Qué era?

Hmmmm...

ADIOS. Sin material. Espacio vacío.


miércoles, 1 de julio de 2015

DIA 2 - EL COCODRILO is back

Ya en la dieta anterior lo descubrí. Me asombra que siga estando. Me refiero al viejo, querido, pero sobre todo hago énfasis en VIEJO... cocodrilo del gimnasio.
El geronte de la actividad física que, en otro contexto, seguramente pueda ser definido como el buen y sabio anciano. Pero no se engañen que, de pie sobre una cinta o elíptica, se transforma en lo que él cree ser: un seductor carnívoro irresistible para algunas. De ahí lo de "cocodrilo". Peligroso como piraña, atractivo como una cartera de cuero verde... para ciertas señoras intere$ada$. Not me.

Me subo en la elíptica y siento que no puede ser que aún me falten 59 minutos de actividad aeróbica para cumplir mi meta del día. Menos 58. Menos 57. Me pongo ansiosa. El teléfono en low battery. Te querés morir. Afino el oído y en la maquina a 20 cm de la mía hay un buen hombre discutiendo en tono amistoso la terrible situación en el interior del país por culpa de la sequía. Su interlocutor, otro setentón piola, a 20 cm a su derecha, se dirige de manera intermitente a su vez, a un tercer veterano. Este último  no nos acompaña en las elípticas sino que está a 3 o 4 metros hacia adelante, marchando a buen ritmo en la cinta caminadora. 

El trío habla sin parar con voz preocupada sobre los escasos milímetros de lluvia caídos durante el semestre, sobre las plagas de langosta, bla, bla, bla. Yo, presa de una insaciable vocación de charlar por amor al arte -y a su vez muy preocupada genuinamente por la falta de agua en Uruguay- estoy a un soplo de abrir mi enorme bocota para opinar sobre lo inopinable (no llueve, es un desastre, punto) cuando...
-Ahhh, la Anna Kournikova.
El dino número 3, sin parar de marchar a buen ritmo en su cinta, fijaba los ojitos en la mini tele de su equipo. ESPN a todo trapo y sin volumen. Partido de algún campeonato femenino de tennis. Y -oh, sorpresa- la pobre Kournikova. En minifalda blanca y los hombros al aire, bronceados.
-Ayer estuvo de visita en casa... Agregó Número 3.
Pensé en vomitar.
-Qué divina que está, largó el "campesino" a mi derecha.
-Paaaa,ni me digan, qué deveeeena que está, escupe Número 2.
Mis ojos casi explotan en sus agujeros. Mis manos se aferraron a las agarraderas de mi vehículo a pedal y ahí sí, ya no pude evitarlo. Precisaba establecer algún tipo de contacto humano o iba a reventar, en una vorágine catártica de insultos al trío LACOSTE. Llamé al profesor de turno, el que controla la sala de musculación y simplemente le advertí: 
-Me están buscando...
Not on MY watch!
Él, que lee mis entradas al blog porque le da mucha gracia reconocer a sus "alumnos" aquí y allá, no pudo evitar sonreír con complicidad ya que, al igual que TODO EL GIMNASIO, no había podido NO OIR ese opíparo despilfarro de estupideces machistas pasadas de tono, de época y de franja etárea.

Así que de aquí hasta el final de esta versión 2015 de la DIETA A REGAÑADIENTES, queridos caimanes y yacarés, cuiden sus hocicos porque Miss Piggy está lista para delatarlos... on- y offline!!!

Con cariño,

KAT

PD: Bajé 1 kilo y medio. Yeeeeey!